La construcción se asienta en una parcela de 7.530 m2, dentro del distrito residencial próximo a la Kasbah, a cinco minutos en coche del centro de Tánger. Fue levantada en la década de los años 40 y es un oasis de privacidad en el que está plasmada la estrecha colaboración entre dos grandes artistas del siglo XX: Laurent y Jacques Grange.

Al entrar en la planta principal, un pasillo abovedado con suelo de mármol lleva hasta los dos salones, el azul y el amarillo, decorados con telas de estampado mítico Liberty. En el comedor, el bambú adorna las paredes como un tributo al diseño de la legendaria interiorista Madeleine Castaing. La biblioteca, con una chimenea de estilo colonial británico, invita a la calma y al recogimiento, mientras la vista se pierde en dirección a las altas ventanas que tienen el jardín como fondo. En la misma planta se ubican las dos espaciosas suites principales, y una habitación de invitados. En un piso inferior hay otras dos habitaciones y una gran cocina. Además, cuatro personas del servicio pueden alojarse en dependencias del jardín, que incluye una pequeña casa para el guarda.

Un jardín de 6.000 m2. Extiende exuberante desde la entrada hasta el acantilado sobre la playa. Es un diseño del paisajista americano Madison Cox, quien concibió un escenario suntuoso.

Como un templo de relajación surge la piscina climatizada de 60 m2. Está excavada en la roca y desde ella ves el mar. Para Fierro, es “una creación de ensueño”, firmada por el arquitecto Stuart Church.

Pero para disfrutar de unas vistas únicas, lo mejor es hacerlo desde la parte superior de la casa, donde está la terraza panorámica, de 600 m2.

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